Conviene volver a considerar, y no dejar de tener presente, un asunto que ya hemos tratado en varios números de nuestra revista. En diciembre de 2015, la Comisión Europea comunicó al Parlamento, al Consejo, al Comité Económico y Social y al Comité de las Regiones una iniciativa basada en un plan de acción de la UE para la economía circular. Dos eran los principios básicos: mantener el valor de los productos, materiales y recursos durante el mayor tiempo posible y reducir al mínimo la generación de residuos. La iniciativa respondía a un intento de impulsar la competitividad de la UE, con el objetivo de crear puestos de trabajo a escala local para todos los niveles de capacidad, ofreciendo oportunidades para la integración y la cohesión social. Además, se pretendía conseguir ahorrar energía y contribuir a evitar los daños irreversibles sobre el clima y la biodiversidad, minimizando la contaminación de suelo, agua y aire por la utilización de recursos no renovables. En esta iniciativa se mezclaban objetivos relacionados con la optimización de la economía, desde el punto de vista de la eficiencia, con otros objetivos que tienen que ver con los aspectos éticos de la producción y el consumo y sus consecuencias sobre los individuos y las sociedades. Hacer compatibles estos objetivos se consideraba fundamental para poder resolver, de manera definitiva, el conflicto entre ‘ley económica’ y ‘principios éticos’. El concepto fundamental de esta iniciativa es la economía circular que pretende: proteger a empresas contra la escasez de recursos y variabilidad de precios; crear nuevas oportunidades empresariales; elegir maneras innovadoras y más eficientes de producir y consumir; crear puestos de trabajo a nivel local, a todos los niveles; favorecer la integración y la cohesión social; ahorrar energía; evitar daños al clima y la biodiversidad, contaminación de aire, suelo y agua y reducir las emisiones de gases con efecto invernadero.
En los últimos años está teniendo lugar la transición en las empresas productivas hacia el concepto de fabricación circular, que incluye el desarrollo de productos, la producción y los nuevos modelos de negocio, tanto a nivel de firmas locales como a nivel global. La fabricación circular incluye la aplicación de tecnologías digitales, el análisis de las políticas de desarrollo y establece recomendaciones importantes para un exitoso tránsito hacia la fabricación circular digital. En el informe del 2021 de la World Manufacturing Foundation se proponen algunas recomendaciones para llevar a cabo una transición hacia una fabricación circular basada en la digitalización, como promover campañas de mentalización sobre la responsabilidad de los consumidores y construir una red que incremente la colaboración para construir cadenas de valor circular. También se definen los objetivos estratégicos de esta iniciativa:
Este proceso, que actualmente involucra a todas las empresas de todos los ámbitos, ofrece una serie de oportunidades de negocio, aunque también se ve afectado por la existencia de numerosas barreras de todo tipo. Un logro importante en la fabricación circular sería mantener alejados de los vertederos los materiales de valor, aumentando su ciclo de vida en las cadenas de producción. Las tecnologías que pueden ayudar a este propósito están relacionadas con la transformación digital: el internet de las cosas, la construcción de cadenas de suministro digitales transparentes, impresión 3D, aplicación de la inteligencia artificial y el uso de tecnologías limpias. Los vientos que azotan nuestro panorama industrial son suficientemente serios como para que seamos conscientes de que innovar y adaptarse al entorno es crucial para nuestra supervivencia a medio y largo plazo. Hoy no es posible mirar a otro lado y esperar la llegada de vientos más favorables. La situación global es extraordinariamente inestable y se hace preciso tomar decisiones valientes y elegir el camino que nos pueda conducir al éxito, y este camino se encuentra trazado por la tecnología digital y sus aplicaciones a nuestros procesos productivos.
Pedro Abellán, junio de 2023
Publicada en la revista CTC Alimentación Nº 78
https://www.ctnc.eu/revistas/revista-ctc-alimentacion-no-78/
