Según el informe la capacidad de I+D+i del país continua deteriorándose, aunque los expertos consultados por Cotec son menos pesimistas que en años anteriores. El gasto en I+D ejecutado en 2012 equivale al 1,30 % del PIB, frente al 1,36 % de 2011, lo que supone volver a niveles inferiores a los de 2008, pese a la contracción del PIB español.
Madrid, Cataluña, Andalucía, País Vasco y Comunidad Valenciana representan más del 77 % del gasto total en I+D del país. Las dos únicas comunidades que han mejorado sus indicadores con respecto al año anterior son País Vasco y Castilla y León.
Cotec acaba de finalizar la elaboración de su “Informe 2014 sobre Tecnología e Innovación en España”, que recoge la evolución de los principales indicadores de I+D e innovación en España, a escala nacional y por Comunidades Autónomas, y su comparación internacional. El documento incluye también la opinión de un centenar y medio de expertos sobre la situación y evolución futura del sistema español de innovación, y un capítulo especial dedicado este año a las “Tecnologías Facilitadoras Esenciales” que está impulsando la Comisión Europea para la modernización y fortalecimiento del tejido industrial en Europa.
Tanto los datos del Informe como la opinión de los expertos consultados por Cotec indican que la profunda crisis que está viviendo Europa, y especialmente España, tiene inevitables consecuencias para el sistema español de innovación, aunque no son igualmente intensas para todos sus agentes y sectores, siendo el más castigado el sector público. Sin embargo, también se observa un cambio de tendencia en la opinión de los expertos consultados por Cotec, a principios de 2014, que se muestran algo menos pesimistas que en años anteriores.
El documento ha sido presentado durante una rueda de prensa, celebrada en la sede de la Fundación Cotec en Madrid, en la que ha participado el Director General de Cotec, Juan Mulet, quien ha expresado su preocupación “por que este año España haya continuado alejándose de Europa en sus indicadores de I+D e innovación, y más aún que la parte pública haya sido la que más se ha deteriorado. La consecuencia más importante está siendo el envejecimiento de los investigadores y de los aparatos y equipos de investigación, que no se renuevan. Afortunadamente, el número de empresas que realizan I+D se ha mantenido constante a pesar de la crisis, si bien no son más de 12.000 empresas, cuando para una economía como la española esta cifra debería ser al menos cuatro veces mayor”.
También se refirió como problemas importantes a que “todos los agentes del sistema español de innovación, tanto públicos como privados, se quejan de las dificultades de financiación; y los expertos consultados por Cotec, a principios de 2014, coinciden en denunciar la falta de consciencia social en España sobre la importancia económica de la innovación”.